CATALÀ

Los juegos de poder (5)

Continuando con este tema, otro tipo de juego de poder frecuente entre las personas es el fingimiento. Ejemplos de este juego son: hacer ver que no se ha oído lo que se le ha dicho, “es que no oí que tuviera que pasar a por el pan”, o el teléfono que falla (curiosamente) cuando se le envían mensajes, hacerse los olvidadizos, (“ay, no recordaba que habíamos quedado ayer”), ignorar las reglas del juego establecidas, (“¡huy!, no me acordaba de que no te gusta que fume en tu casa”), o insistir en lo que se ha negado: (“en serio, es que este teléfono me va fatal!!”). Estas actitudes son típicas en algunas personas, las utilizan de forma sistemática para evitar hacer lo que deben hacer, para romper sus pactos o compromisos sin enfrentarse a ellos, etc. Causan rabia e indignación en las otras personas.


La antítesis consiste en clarificar: “¿te has enterado?” “¿has recibido mi mensaje?, responde, por favor”. La solución cooperativa pasa por expresarle al otro cómo te sientes. “Tu actitud me causa rabia, ¿de qué otra forma podríamos hacerlo?” pero como en todas las soluciones cooperativas, exige compromiso y madurez por ambas partes.

Hay un juego que llamamos “tú me debes”. Explota la culpa del otro o el sentido de obligación. Se da, sobretodo, en relaciones basadas en que uno es salvador (excesivamente protector) y el otro se hace la víctima (juega a tener “menos recursos” o a estar más indefenso). Se establece un vínculo basado en que uno le saca “las castañas del fuego al otro”, y cuando éste se cansa, la víctima exige, haciendo que el salvador se sienta obligado o culpable. Para salir de él, es necesario que el salvador empiece a pensar más en sí mismo y no tanto en el otro, y la víctima empiece a madurar y contar con sus propios recursos. Contrastar el juego claramente es un buen principio: “no tengo obligaciones contigo, te ayudaré si yo quiero”.

Hasta ahora hemos descrito los diferentes tipos de juegos de poder. Pero ¿cómo podemos evitarlos?
Hay 4 tipos de manipuladores o jugadores de poder:

1) Manipuladores conscientes: Saben que están manipulando: Vendedores, políticos... Tienen sangre fría. No se irritan. Actúan con delicadeza y buen humor. Su finalidad es clara: vender, conseguir votos, conseguir un cambio en la otra persona... Si somos conscientes de su juego, podremos escucharles y decidir si queremos o no lo que nos ofrecen.

2) Manipuladores instintivos (o exaltados): Son semiconscientes, no deliberados. Usan el juego habitualmente como forma de relacionarse, para ellos es normal lo que hacen, no creen estar haciendo “algo malo” y escalan: si nos oponemos, juegan más fuerte todavía. La gente se les aparta.

3) Inocentes: No tienen habilidades para el juego, les cuesta reconocer los juegos de los demás. Suelen ser víctimas de los otros tipos de jugadores.

4) Personas que rechazan conscientemente los juegos. Simplemente, no entran en ellos. Prefieren cooperar.

Qué pasa cuando se encuentran:

Consciente con inocente: Manipulación
Consciente con rechazador: Lucha
Exaltado con inocente: Dominio
Exaltado con exaltado: Griterío
Inocente con inocente: Armonía
Rechazador con rechazador: cooperación

No hay comentarios :

Publicar un comentario